Para poder realizar esta función, los músculos son capaces de ejercer una gran presión cuando se contraen. Con la penetración anal, estos músculos se contraen y causan una fuerte tensión sobre el pene, que produce el goce sexual a quien penetra.
Este es el esqueleto en el que trabajaremos. Y cuando le adicionemos suficiente substancia a este perfil, ¡aun tú quedarás impresionado! Mas primero dejemos claro determinados puntos donde la mayoría de la gente falla: las trampas en las que solemos caer una y otra vez.
Una serie de ejercicios fáciles para robustecer los músculos del área: contráigalos por 5 segundos (tal y como si estuviera refrenando los deseos de orinar) y seguidamente relájelos, por otros cinco segundos (estos son los llamados EJERCICIOS DE KEGEL).
Carlota Universitaria catalana, alta, muy elegante y educada, te hará sentir singular en vuestros instantes íntimos.
Con su coño dando palmas de placer, Julia se tragó la poca dignidad que le quedaba. No podía pensar que la tuviesen sosten con un collar y una correa. Ahora carecía de sentido resistirse, pero la próxima vez, contando que quisiese regresar a repetir, no iba a estar tan predispuesta a estas cosas.
Fran deslizó el vibrador en el coño de Julia, que era incapaz de detener el clímax que le provocaba aquella estimulación artificial. Los chicos chillaban y animaban, cuando otra polla entraba en su boca.
Los masajes aumentan la circulación sanguínea en los músculos que son masajeados y son muy efectivos cuando se combinan con una atmosfera romántica para reducir la tensión y el estrés y mejorar el estado anímico.
En el siglo XVII, el anatomista holandés Regnier de Graaf escribió un innovador tratado sobre los órganos reproductivos femeninos. En él hay una descripción del líquido y lo vincula a una zona erógena dentro de la vagina que se semeja mucho a la próstata masculina, explica el texto.
Muchas parejas encuentran que practicar únicamente el sexo tántrico no es algo apropiado para ellas pero si les agradan las ideas básicas sobre el sexo tántrico, como la de sentir un vínculo más próximo con tu pareja.
Obviamente, respetarás sus deseos de no ser ahogado, pero puedes sentir que algo de tu dominio ha sido socavado, haciéndote sentir menos como tú mismo en el dormitorio. Y su pareja puede sentir que no desempeñó su papel frecuente, y puede sentir que el sexo está perdido.
