La mujer levanta una pierna sobre su pecho y la apoya en su hombro, al tiempo que la otra pierna se extiende en torno a su muslo externo. La mujer luego levanta y baja su pierna extendida, trabajando sus abdominales. Trate de proseguir a lo largo de tres a 5 minutos.
Las personas confiadas, además, tienden a repetir una serie de ademanes que las delatan. Entre esos ademanes se puede destacar la tendencia a unir las manos tras la cabeza y la costumbre de, al estar sentadas, estirar las piernas y reclinar el cuerpo levemente.
¿Realmente tengo posibilidades de lograr lo que deseo? Olvídate del típico me desea o no me quiere. Olvídate si ella está enamorada de otro hombre. Concéntrate en lo que puedes ofrecer, ¿qué tienes tú que merezca la pena estar a tu lado?
Saber que la mayor parte de las mujeres piensan hablando, evita muchos problemas en el noviazgo y el matrimonio. Por ejemplo, muchas parejas empiezan acaloradas discusiones por alguna ‘locura’ que ha dicho. Pero era sólo un pensamiento, no era algo que en realidad ella iba a hacer.
Recuerda que todas y cada una nuestras temáticas están resumidas, para evitar estresarte con muchos conceptos. Si verdaderamente te interesan el diálogo y la comunicación, profundiza más en estos 2 temas. Ahora date a la labor de reflexionar individualmente.
La estimulación del Punto G a través de la introducción del pene resulta difícil si no se ayuda con la estimulación manual, singularmente en aquellas mujeres que tengan la vagina distendida debido a la maternidad.
Desde la reiteración de los mismos patrones las personas edifican la imagen de sí, que, como sabemos, es una reacción a heridas emocionales o bien físicas sufridas anteriormente. Es simplemente una imagen y como tal, no es precisamente real.
El amor a los otros no excluye el amor a sí mismo; lo que no implica consagrarse exclusivamente a uno mismo en una actitud narcisista. La idea es que desde el autocuidado y la autoconsideración me habilito para dar a otros. Por otra , no se puede equiparar el amor a sí mismo con el egoísmo.
Interactuar con varios travestis al tiempo, o ser activo y pasivo en una misma noche con 30 hombres diferentes, clavar a veces o ser culiado otras tantas, tragar el sabroso semen de infinidad de pijas, o bien relamer cuanto trasero se atraviese, eso es disfrutar del sexo al máximo.
Mas si nos referimos al terreno de lo personal es demasiado usual y general comprobar una tremenda incomunicación entrelos hombres. Aún entre los buenos amigos raras veces se da una comunicación franca y profunda.
